Enseñanza: Dios se glorifica en tus debilidades.

TEMA: Dios se glorifica en tus debilidades.

TEXTO: 2 Cor 12:5-10, Fil 3: 1-8

INTRODUCCIÓN: En base a las debilidades humanas se pueden cometer muchos y peligrosos errores, incluso pecados. Claro que no todas las debilidades se comenten pecados ya que las debilidades no son pecados en sí mismas. Más bien el ceder a ellas y deslizarse, es lo que lleva al pecado. Jesús dijo a los puritanos que trajeron a la mujer adúltera “El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la primera piedra sobre ella”. Jn 8:7. Ninguno de los condenadores, que se creían más santurrones que nadie, pudo tirar una sola piedra con las manos, aunque hoy en día, hay quienes tiran las piedras con la lengua.

Ese Dios es nuestro Dios que usa personas débiles, simples, sencillas, inútiles, para glorificarse en sus debilidades para que nadie se gloríe. 1 Cor 1:26-29

Es muy importante notar que los únicos que hemos dado el carácter de “perfectos santos” a los grandes hombres y mujeres de la Biblia somos nosotros, más la Biblia registra que esos hombres eran sujetos a pasiones como nosotros entre ellos Elías y Jonás. No estoy diciendo que los hombres llamados por Dios no sean Santos, lo que quiero decir es que la santidad no quita debilidades tampoco la oración, ni el ayuno, aun cuando nos dan fuerza contra la carne y enriquecen el espíritu, con todo y eso las debilidades son parte de cada ser humano sobre la tierra. Si no analicemos el ejemplo del Apóstol Pablo, cuando se convirtió el Apóstol Pablo y se fue a las misiones, él escribió su primer libro y fue 1 Tesalonicenses y en el capítulo 5 y versículo 23, en ese momento del inicio de su conversión se creía un gigante espiritual no había pasado por aquellas grandes pruebas que Dios le había dicho que le sucederían, todos nos sentimos así cuando iniciamos nuestra conversión, pero 10 años después ha pasado y se ha encontrado en la lucha de sus debilidades carnales, las que antes pensaba que dominaba, pero por más que oraba, y le pedía a Dios, se mantenían latentes y escribió Rm 7:21-25. Al igual que Pablo usted y yo también tenemos debilidades porque Dios hace pocas maravillosas con los santurrones, porque creen que las hace por los méritos que creen tener. Rm 3:23-24